domingo, 3 de abril de 2011

Salir a la vida

Durante el turno de noche, algo está llegando a su fin, un mapa de destinos, y una derrota brillando como metal, el mismo que tendrá que rasgar las tinieblas, yo quería vivir, qué será la realidad cuando todo se pierde? En esta ruta todos los viajeros son pobres. y los insectos se ponen en fila para acompañar, cálidas mejillas besadas, y las palabras son como los silencios entre beso y beso. para nosotras que amamos hasta la extenuación, que amamos el rugido de la fiera, que tenemos en el corazón audacias sin sentido, sentimos que quizá ya no hay nada que esperar… pero todo sigue quemando, y vivimos como si empezásemos a salir a la vida por primera vez. cuando la veo entrar por las mañanas en el ascensor de atrás, el que dá a la fábrica, con las ojeras azules y los ojos brillantes pienso, las dos venimos de la oscuridad, en silencio, el silencio que oculta la herida, en un altar ficticio dejamos la ofrenda y salimos llenas de desesperación, no tendremos descanso, sólo batallas intensas que batir contra nosotras mismas. recuerdo las amistades perdidas por motivos clasistas, sus monedas brillan en la soledad de un mundo de coronas falsas, mi mundo es un camino hacia tu determinación, cuando por las mañanas ella me mira, un estremecimiento de sensualidad me cruza el cuerpo, y pienso en ti, he conocido a una extraña silenciosa como tú y como yo, y es hermosa…

Imagen, Ryan McGinley

10 comentarios:

Errata y errata dijo...

"Mi mundo es un camino hacia tu determinación". Lo dice todo.
Besos,

Say dijo...

Maia,
aún en el filo todo puede ocurrir...

Un beso

marcela dijo...

Los silencios ocultan la herida, y las determinaciones sulen tomarse en silencio. Nunca oculté y esperaba respuestas que no llegaron.
Así son los silencios, ocurren en el momento que el otro no sabe que decir.
Un beso

Say dijo...

marcela,
a veces, estamos en circunstancias de difícil "solución" y llega un momento que no encontramos la forma de encontrar la salida, y cuando estamos en la más absoluta fragilidad, nos escondemos en el silencio porque ya no sabemos de palabras. Y está el otro silencio, ese que no quiere o no puede dar respuestas...ni un sí, ni un no, y que tanto daño puede hacer.

Un fuerte abrazo

fiorella dijo...

No siempre hay palabras, aunque si las hay pero el silencio saber decir.Un beso

Say dijo...

fiorella,
es cierto, el silencio atesora un lenguaje propio...cuando tienes a la persona amada cerca y puedes verla, mirarla, sentirla...los gestos sin palabras, los ojos, la risa, la sonrisa o las lágrimas, el tacto, el roce...dicen mucho. Cuando la persona está lejos, ausente, los silencios tienen otros significados y es cuando te vuelven loca de incertidumbre!

Un beso de la que está chaladamente enamorada:)

Stalker dijo...

Tu texto es hermoso. Se quiere uno dormir en el rugido de la fiera, en el silencio, la insurrección, el don, el fuego que no se extingue y vive en las palabras y más allá

todo "eso" habrá de ser preservado de la corrosión, del implacable vértigo de este mundo,

un abrazo

Say dijo...

Stalker,
si nos salvamos algún día, será porque "eso" queda preservado en las personas que, como esa mujer que me cruzo en el ascensor, tienen dentro de sí lo inestable de la vida, el fuego que abrasa y pide, el silencio cómplice de los silenciosos, la insurrección de los que no transigen ante "las cúpulas doradas"...

Si resistimos es porque sentimos que tenemos cómplices en este lado de la verja e incluso que tenemos cómplices al otro lado de la verja...

Y porque siempre habrá un encuentro, con algo o alguien, que nos acompañe en la fuga y en el camino.

Un beso mi querido búfalo!

vera eikon dijo...

Tus textos acogen como un abrazo...
Me gusta esa sensación de cuando de pronto alguien sobresale en lo cotidiano, y (retomando tu entrada anterior)de cuando comenzamos a soñarlo...

Un abrazo

Say dijo...

vera,
esa sensación, esos pequeños encuentros son los que nos hacen seguir soñando...

Abrazos!