lunes, 7 de noviembre de 2011

Volar sobre la nieve

Un día voy a cansarme de decirte que estoy bien y voy a decirte, al oído, que estaría mejor contigo. puedo ver mi casa desde aquí, quién va a pensar que Pushkin es menos comprensible que un jeroglífico. Lanzo Pushkin, Dostoievski y ellas, las mujeres escritoras que tanto amo, mi destino libre...desde esta habitación miro el barro sucio que he traído en mis zapatos, ¡dime un sinónimo de oscuridad!, ¿la escarcha en ese campo prusiano?... ¿los alrededores del puerto nevado donde quebró el amor?. pusiste tu cabeza sobre mi pecho, tu mano en mi frente cuando padecí la fiebre, mi día es largo. volar, volar sobre las heladas estepas. perpetuamente es vivir, donde todo parece extinguirse, atreverse, tan loca

Imagen, Amundsen

6 comentarios:

Darío dijo...

A la fuerza, va a tener que entender ese murmullo en su oído.

Say dijo...

Joven,

y vendrá para quedarse?!

Darío dijo...

Es que el murmullo parece...mmmmmmmm...irrechazable?

anamaría hurtado dijo...

"...donde todo parece extinguirse, atreverse..."
así como ese barco zarpará, de la helada estepa a la blandura del mar.

habrá que repetirlo al oído.
abrazo escarchado

Say dijo...

Joven,
se lo susurraré de esa forma...para que sólo desee quedarse conmigo...

Say dijo...

ana,
el barco zarpará, cruzará un mar inmenso...con la intención de llegar al otro lado donde el hielo ya esté derretido...

al oído diré palabras de amor...

un abrazo escarchado, qué precioso ese abrazo anamaría!