miércoles, 18 de mayo de 2011

Teorema

“Qué debería valer más: tu identificación o tu ser? Tú no sabes elegir, tierna Odetta, porque estás ciega: así has elegido, así has vivido. Y te debates inútilmente, perdida entre un recuerdo demasiado hermoso y una realidad que te lleva del sueño a la locura.”


Texto e imagen, Teorema, Pasolini

8 comentarios:

Lola dijo...

Y una realidad que te lleva del sueño a la locura. Impresionante.

Stalker dijo...

Este año pensé trabajar "Teorema" en clase, pero al intenter resolverlo daba un resultado absurdo o infinito: tantos como tantas formas de mirar, no hay una única llave...

quizá ésa es la clave: nosotros somos la llave, la cerradura, el umbral, la pregunta, la respuesta, el pacto, la promesa,

si tan sólo pudiéramos cultivar el don de la lentitud e instalar la atención ahí donde el tiempo se hace hueco...

un abrazo

Say dijo...

Lola,
así es...del sueño a la locura...

Say dijo...

Stalker,
me gustaría que lo intentases de nuevo. Teorema y todo Pasolini...y sí la llave está en nuestra propia forma de sentir el deseo

del deseo que sufre en la interioridad, la perturbación que sentimos al visualizarnos, él cuenta lo que encierra nuestra conciencia original, el sexo y la muerte que desde siempre han sido tabú y causa de castigo y marginalización.

instalarnos en la experiencia de un mundo muy diferente a los usos de nuestra razón...

Un abrazo

Lectora dijo...

Pues yo aún estoy con la primera frase eh?....
Sospecho que hay poca gente que conecta con su ser, Sócrates hablaba de su daimon, lo más curioso de todo es que hay olvidarse del mundo para encontrarlo, y entonces el mundo empieza a entenderse ¿no crees?

Say dijo...

Sonja,
ese dios interior, sin duda, habría que encontrarlo y seguir el oráculo que nuestra voz interna nos dice. Claro, a veces, las voces son muchas y sólo, al final, quizás, cuando hemos errado y caído tantas veces, sabremos dar con el camino.

yo también estoy en la primera fase. como Odetta, no sé elegir: me debato entre recuerdos hermosos y una realidad que me lleva del sueño a la locura...

si conecto con mi ser, sólo encuentro un daimon: los divinos demonios del amor.

olvidarse del mundo es imposible, hay demasiado ruido en él...

Lectora dijo...

Los divinos demonios de amor.

¿Sabes? el otro día pensaba que casi podría decirse que siempre hay un algo que define a cada persona, en el fondo detrás del ruido y en la gente mínimamente conectada consigo misma es como si existiera una premisa básica que predomina sobre todo lo demás.
No me atrevería a decir una "misión", no se, tal vez una fijación.
¿Ecos de antiguas vidas? sinceramente no creo en eso, pero a veces dudo.

A lo mejor sencillamente la herencia genética (no solo en lo referente a la carne sino también al espíritu) nos condiciona más de lo que pensábamos.

En fin, cosas que se le ocurren a una y solo se pueden comentar en lugares como este, gracias Says por proporcionar esta morada para ello.

Say dijo...

Sonja,
si logramos salir de esta red de cárceles que nos hemos creado. El ser humano está alienado y ha perdido la conciencia de su alienación. Ahora mismo todas las pertubaciones, la necesidad, el carácter, el ser de una persona viene cercenado y ahogado en pensamientos e ideologías manipuladoras. La sociedad política nos ha inculcado hasta la forma de amar y desear. Y vivir.

Los aspectos genéticos influyen y como dices, en el instinto que a veces nos asalta de forma salvaje, estén esos ecos de antiguas vidas...aunque, la "misión" o la fijación que cada uno tenemos en nuestro interior viene dada por las circunstancias, los contextos incompatibles, las familias en las que nos han "educado", etc. Si algo de libertad queda en ese impulso primigenio de sentir, buscar y amar, y vivir conforme a esos ecos, es porque hemos reflexionado activando fuerzas internas de rebelión.

Incluso en los campos del conocimiento tenemos las peores consignas. El "falogocentrismo" ha sido el totem perverso de la base de esta pirámide.

Un abrazo!