jueves, 25 de julio de 2013

la vida y los tiempos

Anna Gaskell



Anna Adén, noche del solsticio de invierno



Anna Adén 


Cody Bentley


"Todo este tiempo ha habido tiempo. No puedes matar al tiempo con el corazón."  David Foster Wallace, En lo alto para siempre

2 comentarios:

Vanina dijo...

Querida Say,

una vez te comente que de no ser por Suecia yo estaria probablemente muerta.

Suecia llego a mi - y yo a ella - en un momento de mucha tristeza y desesperacion.

Fue, entre otras cosas, el ascetismo de sus paisajes, la calma latente de los inviernos largos, las noches interminables, lo que me recupero.

Las fotos de Anna Andén reflejan esa sensacion de suavidad, de seda, de nebulosa, de dulce estado de somnolencia, de olvido, de vuelta a la esencia de las cosas, al minimalismo de lo necesario, de cura silenciosa, de recogimiento.

Ya entrado el otoño, cuando el invierno se asoma, uno siente en el cuerpo y en el alma como las cosas se relentizan y se preparan para descansar.

No existen tristezas que un invierno en Suecia no pueda curar.

Un beso fuerte.

V.

Say dijo...

Vanina,
recuerdo tus palabras, no se pueden olvidar nunca tus palabras, me gustan mucho. es hermoso esto-la lengua entre los cuerpos. esta preciosa santidad de nombrar como en un poema. me gusta tanto poder decir la vida. Vanina, como tú la dices, tus palabras es una gracia salvadora. yo las imagino, como cuando en la más angustiosa sed, viene el río, y nos tiramos al río, y nos mojamos las mangas, el pecho, la ropa, todo, y con la mano bebemos el agua cristalina...


ah, conozco una parte de Suecia. mucho.conozco algunos paisajes con las brumas del norte maravillosos. mi fotosíntesis. lo que recoge mi vida no son los cielos y cierta sociedad tan insoportablemente vertical del sol, aturdidora y cegadora por la violencia de la luz y el ruido.

si eso fuera permanente sería una tortura para mí,

necesito ese ascetismo en los paisajes, la calma latente de los largos inviernos, la suavidad, la nebulosa, y el dulce estado, todo lo que a ti te recuperó...

por eso me gusta tantísimo Anna Adén. para mis entradas he recurrido a muchas imágenes suyas, la atmósfera que transmiten sus fotografías es idéntica a mí, es un yo real y un yo alucinante como consecuencia de las percepciones...

Vanina, es algo tan hermoso lo que describes de las fotos de Anna Adén, es que es así como lo percibo,

“sensación de suavidad, de seda, de nebulosa, de dulce estado de somnolencia, de olvido, de vuelta a la esencia de las cosas, al minimalismo de lo necesario, de cura silenciosa, de recogimiento.”

“No existen tristezas que un invierno en Suecia no pueda curar”.

ah, Vanina, y yo vuelvo a decir lo mismo, qué afortunada es Suecia de tenerte allí!!!